Sobre Cataluña. En respuesta a mi amiga Noelia.
(Lo que viene a continuación es una respuesta a mi amiga Noelia dentro de un debate ya algo largo que ha tenido lugar en Facebook sobre el referéndum de Cataluña. Lo publico aquí porque es una respuesta algo largo, es perfectamente comprensible sin necesidad de conocer los detalles anteriores del debate, y porque puede valer como resumen de mis principales puntos de vista al respecto del asunto).
Es evidente, Noelia,
no estamos de acuerdo. Quién sabe, quizás el desacuerdo en buena
medida sea debido a que nuestras experiencias personales son muy
distintas sobre este tema. No sé, tú estuviste un tiempo por
allí, y probablemente conociste a independentistas o nacionalistas
que eran gente fantástica y con la que estabas en gran sintonía en
aquel momento. Esa y otras cosas es probable que te hayan dado un
punto de partida más favorable y menos duro con respecto al catalanismo en
general. En todo caso está claro que es normal e inevitable que las
personas disientan, por el simple hecho de que vemos el mundo
necesariamente desde ángulos distintos, de que en realidad no vemos
lo mismo, y nunca partimos del mismo lugar. Ello no nos hace
necesariamente enemigos, ni convierte a uno en ángel y al otro en
demonio. Hay que repetir estas naderías hoy más que nunca porque no
debemos permitir que la tensión de estos días (y que tiene pinta de que se va a alargar) se lleve por delante también las
amistades y los afectos.
Me dices que en
parte tengo razón en algunas cosas, cosas que no son menores. Tú
pones el énfasis en Rajoy, y en el PP. Eres muy libre, razones no te
faltan para criticarles. Yo sabes que no soy gran fan ni del uno, ni
de lo otro. Pero no puedo evitar indignarme en relación a esas otras
cosas en las que tú, al menos, sí me concedes una parte de razón: la
patria, y el golpe. Y aquí está el matiz, y el punto de mayor
disenso. Yo no eximo de responsabilidad al gobierno de Madrid, pero
apunto aquí y ahora directamente a la otra parte como
desencadenante y máxima responsable de la tensión en la que
estamos, y que nadie sabe hacia dónde nos puede llevar.
Y es que yo no creo
que el referéndum sea una chapuza, como tú dices. Es algo muchísimo peor: es un golpe de estado, es una institución del Estado que se declara en
rebeldía obviando los intereses de TODOS LOS CIUDADANOS a los que
representa. Es un golpe, Noe, es algo extremadamente grave. Y es un
golpe que se ha perpetrado -se está perpetrando- con alevosía,
desde hace ya bastante tiempo, con ajustado cálculo. Golpe que se
ratificó a través de una sesión parlamentaria que tuvo tintes de
opereta, pero que estuvo también marcada por palabras y actos
dictatoriales, con un casi total desprecio por los derechos de la
minorías, y en nombre de trolas y de exageraciones terribles, y
grotescas. No, no es una chapuza, por eso me indigno. De hecho, cada vez tiendo más a pensar que
es todo lo contrario. Da la impresión de que está todo
bastante bien montado, tan bien montado que están a punto de
conseguir sus objetivos. Los organizadores del circo conocían bastante bien a su público, a sus acróbatas, a sus artistas, a sus críticos circenses, y a sus fieras. La función puede terminar en éxito arrollador.
Por otro lado, lo
seguiré diciendo: ninguno, ninguno de los principales argumentos del
nacionalismo o del catalanismo resiste ni el más mínimo análisis
racional, y son en lo substancial fruto de manipulaciones, y surgen de fes inquebrantables y
prejuicios mezclados con fábulas mágicas, hacia el pasado, y hacia
el futuro, a nivel político, histórico, económico, y hasta
matemático.
Cataluña NO tiene
derecho a la autodeterminación, y mucho menos tiene tal derecho
basándose en el derecho internacional.
NO ha tenido lugar
ningún expolio por parte de España a Cataluña.
NO existe ninguna
opresión de la cultura y de la lengua catalanas.
España NO es un
país autoritario porque no conceda el derecho de autodeterminación
a sus regiones (o naciones). Este asunto es de aurora boreal, y hace
arquear las cejas con algo de rubor a constitucionalistas de todas
las razas y condiciones.
NO ha habido ni hay
ninguna violación de derechos individuales perpetrada contra los
ciudadanos catalanes, ni como seres humanos, ni como catalanes.
SÍ, sí se ha montado un
golpe desde una institución poderosísisma del Estado en nombre de
algo menos que la nada, en nombre de la deshonestidad intelectual, la
manipulación, la tergiversación y de un egoísmo muchas veces
quizás inconsciente, pero tribal y basado en buena parte en el odio
y la xenofobia. Se ha montado un golpe que está teniendo éxito, es
un golpe en el que se están azuzando los peores instintos de dentro
y de fuera de Cataluña.
En este ambiente y
contexto, algunos dan por sentado que el Estado central está reprimiendo
al pueblo catalán, como si la policía estuviera deteniendo y
torturando a granel por las calles de Barcelona o Badalona. Se habla
de humillación al pueblo catalán porque el Estado está usando
todos los mecanismos a su alcance para impedir un referéndum que es
la pieza fundamental dentro de un proceso que es un golpe de estado,
un referéndum deslegitimado incluso por las propias leyes ilegales
aprobadas ad hoc para convocarlo, declarado abiertamente ilegítimo
por la Comisión de Venecia, no reconocido nada más que por sus
convocantes, que reconocen sin tapujos que son juez y parte en
todo este tinglado.
El gobierno central
está cometiendo errores evidentes. La ostentación de la fuerza, en el despliegue
de medios (lo del ferry lleno de guardias civiles con el dibujo de
Piolín es para antología de la estupidez humana). Son imprudentes e
idiotas las declaraciones del muy eminente Fiscal general de Estado,
un personaje casi siniestro, sus avisos son casi de chulo de barrio. Rajoy
sigue con sus mantras vacuos de tedioso y triste Registrador de la
Propiedad... Es muy patético, y a pocos puede extrañar. El Estado
Español está donde está no por casualidad, la tosquedad y la falta
de audacia de Madrid ha sido una constante en los últimos 200 años.
No hay nivel. Se están juntando el hambre con las ganas de comer, y
cada vez parece más claro que: “alea jacta est”.
Eso sí, habrá que
repetir lo obvio una vez más: el Estado español del año 2017 no es
la dictadura de Franco, ni ninguna dictadura.
Yo acuso y
considero principal y directo responsable de la situación en la que
estamos a los perpetradores directos del golpe de estado. Señores
Puigdemont, Junqueras, etc: nadie en su sano juicio debería
concederles que han tenido ustedes excusas, razones o motivos para
dar semejante paso. Son ustedes unos golpistas, están ustedes
actuando no solo en contra de la ley básica y fundamental de la que
ha emanado su poder y autoridad, están ustedes actuando de forma
irresponsable, inmoral e indecente.
Y claro que me indigno, Noe. Me indigno porque se están
pervirtiendo de la forma más obscena palabras que yo creo muy, muy
importantes, y por las que en su día me arriesgué a ir a la cárcel:
democracia, libertad, derechos humanos y desobediencia.
He trabajado ciertamente para organizaciones catalanas y con gente catalana y he conocido a más internacionalistas que independentistas. En mis debates con compañeros de trabajo si eran independentistas casi siempre me centraba en hacerles entender que su sufrimiento y represión era muy parecido al que habían sufrido pueblos de la Castilla profunda. Eso que ahora llaman Hispanofobia jamás lo he visto.El hecho de no hablar el catalán nunca ha sido un problema ni he sufrido ninguna desaprobación al respecto.Me han dado oportunidades laborales y de aprendizaje que no he encontrado en otros sitios y siempre ví una sociedad civil muy concienciada con y movilizada , no necesariamente con la independencia sino con todo tipo de causas.Siempre ví una sociedad más avanzada en el camino necesario para la construcción de un mundo nuevo.Los debates y las iniciativas sociales que allí había llegaban a otros sitios diez años después.Eso es lo que yo viví.Despejado esto luego sigo con más cosas de las que comentas y que , en lo fundamental, no estoy nada de acuerdo con tu manera de ver, contar y analizar el problema
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